“El uso querido, adoptado de las carnes,
no lo es todo”
“Ni el amor, el guerrero que todo lo puede”.
en permisiva complicidad de las sábanas,
dos pieles se reconocen, mimetizan.
Dos apreciados cuerpos desnudos, necesitados.
Brillo adulto de miradas que se buscan,
en un solo pensamiento: deseo.
Calor titubeante buscando el ardor del igual,
encontradas humedades dispuestas,
complementados en diapasón florecido,
autentico, de la complicidad consumada.
Sábanas blancas, cuerpos desnudos y,
en lo más alto, la luna…
*José Manuel Salinas*
Precioso, tierno, pasional. Muy bueno este poema.
ResponderEliminarDe todo un poco Yashira, me alegra te haya gustado, gracias por estar.
EliminarBesos.
Muy lindo amigo, hace tiempo que no te leía, y escribes muy bello.
ResponderEliminarUna abrazo grande.
Hola Paty, cuanto tiempo sin saber de ti, (aunque te suelo seguir por facebook) un honor que agradezco en lo profundo de la amistad, gracias y buenos deseos para ti y tu familia.
EliminarBesos, José
Aun recuerdo el pequeño dueto que hicimos, quedo genial, jajajajaja.
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